Hay personas que trabajan (y cobran) en este Ayuntamiento para sabotear, aunque eso perjudique gravemente los intereses de los ibenses. Es una afirmación dura, pero los hechos hablan por sí solos. Ayer jueves día 22, se celebró el pleno en el que se aprobaban definitivamente los presupuestos y la plantilla para 2025. Tanto PP como VOX votaron en contra de la urgencia de la sesión (los presupuestos y la plantilla no les parecen urgentes). El PP se abstuvo en la votación del presupuesto y votó en contra de la plantilla. Por su parte VOX, no a todo, para variar. El PP intentó, sin éxito, poner en duda la legalidad de la plantilla de personal que iba a aprobación, pese a que ésta disponía del informe favorable de la Interventora municipal, que es habilitada nacional y de la Técnico de Recursos Humanos.
Esta es la penúltima (intuimos que no será la última) maniobra para poner trabas, dificultar o sabotear cualquier solución que alcance el equipo de gobierno a los problemas que ellos mismos, el PP, creó en la anterior legislatura. VOX le va a la par en esta misión destructiva que se han autoencomendado.
Recordemos que VOX presentó una solicitud de nulidad del pleno en el que se aprobaron los presupuestos de forma inicial, es decir, intentó que el pleno no se celebrara argumentando que se había convocado una fecha diferente a la habitual. Después, tanto PP como VOX votaron en contra de la urgencia de la sesión plenaria, intentando nuevamente que no se celebrara y, acto seguido presentaron sendos recursos de reposición contra la convocatoria del pleno. Por supuesto, ambos grupos votaron en contra de los presupuestos y, tras ser aprobados inicialmente, VOX presentó alegaciones contra los presupuestos y la plantilla, en el último día de plazo, lo que deja patente su mala intención y el ánimo de retrasar lo máximo posible la aprobación definitiva de estos instrumentos de gestión tan importantes para los ibenses.
Anteriormente ya tenemos ejemplos de intento de sabotaje a las soluciones. Sin ir más lejos, el PP votó en contra de la aprobación del cierre contable de 2022. ¡Votaron en contra de sus propias cuentas! Todo con tal de retrasar y sabotear el funcionamiento normal del Ayuntamiento.
Con todas estas maniobras no han conseguido parar los nuevos presupuestos ni la plantilla, ya que todo se ha hecho conforme a ley, pero si lo han retrasado lo máximo posible, con la esperanza (fallida) de poner en peligro ciertas actuaciones que necesitaban urgentemente tener los presupuestos aprobados para salir adelante.
Que cada cual saque sus conclusiones, pero al final, lo que define a cada uno no es lo que dice, sino lo que hace, y en este caso, los hechos hablan por sí mismos. Tras todo lo que han hecho, no nos queda duda de que PP y VOX han decidido ejercer una oposición destructiva.
Nuria Pina Huertas
Portavoz del Grupo Municipal Socialista de Ibi