Ver para creer

Según hemos podido leer en un medio de comunicación digital, nuestro Presidente de la Comunitat, Francesc Camps, se vanagloria anunciando la puesta en marcha de una universidad privada por Internet, eso sí, con financiación pública.
Con los centros universitarios valencianas al borde del colapso financiero y con una situación como la que estamos viviendo, no es la mejor de las opciones, sobre todo cuando se trata del dinero de todos los valencianos.
Todavía no se conocen, según afirma el periodista que redacta la noticia, cuáles serán las disciplinas de enseñanza, ni el grado de homologación académico que obtendrán los alumnos. Los únicos convenios alcanzados con otras universidades son dos: con la universidad católica del arzobispo García Gasco – sin reconocimiento de su plan de estudios de Medicina por el Ministerio de Educación – y con la también católica, CEU-San Pablo.
No hemos alcanzado todavía el grado de normalización lingüística total en la Comunidad Valenciana, y Camps, junto con Alejandro Font de Mora, no sólo instauran Educación para la ciudadania en Ingés sino que además denominan oficialmente a esta nueva Universidad Virtual  “VIU” (Valencian International University).
Sigue comentando el periodista que los cinco rectores de las universidades públicas valencianas, soportando los cerca de 900 millones de euros en números rojos por falta de la financiación comprometida por la Generalitat del PP, han dado un “suspenso” colectivo a la iniciativa.
Sin embargo y pese a todas las críticas que está recibiendo, nuestro Conseller Font de Mora declaró hace pocos meses que “se invertirá en la VIU lo que sea necesario”, en respuesta a una pregunta parlamentaria que le hacía en “Les Corts” la diputada Noguera, dándole a entender que el PP no se ha fijado límites en este nuevo proyecto privatizador universitario. En el borrador de los presupuestos autonómicos de 2009, a falta de ser aprobados, figura una partida de 3,2 millones de euros para la VIU, sin especificar su destino concreto.
Si continuamos leyendo la noticia, nos encontramos que pese a tratarse de una universidad virtual, la “Valencian International University” tiene reservado un terreno de 11.000 metros cuadrados para su “claustro”, en pleno centro urbano de Castellón, territorio político de  Carlos Fabra.
El diseño de esta sede se ha adjudicado, sin que mediaran más opciones, al arquitecto norteamericano, Frank Gehry, uno de los más caros actualmente del ingenio arquitectónico mundial. Su nómina y los compromisos adquiridos se guardan bajo el más estricto secreto, desde que en abril de este año, fuera en persona el conseller Font de Mora a visitarle para cerrar el trato al estado de California, donde reside el ínclito arquitecto.
Sigue afirmando el periodista que desde  el pasado 24 de octubre, se sabe quién es el primer rector de la VIU. El cargo, a dedo, ha recaído en un ex profesor universitario, José Sanmartín, que dejó la docencia universitaria por la política en 1995, de la mano de Eduardo Zaplana. Fue responsable del área de Trabajo y Asuntos Sociales en el primer gobierno zaplanista, pero la gestión pública del ex profesor, Sanmartín, se truncó por cese fulminante, cuando no había cumplido ni siquiera dos años en el puesto. En el curriculum del ex-docente, reciclado en la política, no constan ni especialidades, ni conocimientos suficientes en tecnología informática del nivel que requiere el puesto.
Después de leer esta noticia, ya podemos entender porque nuestros alumnos siguen en barracones, porque no se desarrolla y aplica en la Comunidad Valenciana la Ley de Dependencia, porque nuestra sanidad pública está colapsada y con listas de esperas de meses e incluso años. Y decimos que lo entendemos, porque esta es la política del PP; la privatización de todos los servicios esenciales y básicos, que con esta política solo serán alcanzables para el bolsillo de unos pocos afortunados y el resto de ciudadanos, a sobrevivir como en otras épocas.