Hace tan sólo unos días, podíamos ver cómo un montón de personas, con toda la razón del mundo, se congregaban en las plazas de las ciudades más importantes de España con la intención de pedir a la clase política y económica española toda una lista de mejoras muchas de ellas muy importantes y necesarias. Hace tan sólo unos días se pedía desde varios puntos de la red la abstención al grito de “no les votes”. Hace tan sólo unos días, los simpatizantes de la derecha gritaban “esto es democracia y no lo de Sol”. Hace tan sólo unos días, la derecha ha arrasado en el País, la Comunidad Valenciana; pero ha perdido en Ibi la mayoría absoluta.
Es un hecho matemático observar que en el momento en el que la izquierda duda, la derecha arrasa. Un hecho que además ha pasado siempre y esta vez no ha sido una excepción. Además, hay que tener en cuenta que más de un 30% de población se ha abstenido – tan sólo en Alicante hay unos 90.000 ciudadanos que no han votado – que, sumado a la gran cantidad de votos nulos y en blanco, nos indica que hay mucho que reflexionar. Llevamos unos años con una serie de movimientos de no votar a los partidos mayoritarios, pedir el “no les votes”, la siempre fatídica frase de “todos son iguales”, la falta de explicación de las cosas a la gente que pregunta,… La gran virtud y el gran problema (dependiendo de cómo se mire) de la izquierda es la autocrítica, una autocrítica que ahora se ha de traducir en reflexión para seguir trabajando por nuestro único objetivo: lo mejor para la ciudadanía. Una autocrítica que es impensable en un partido como el PP en el que el voto es devoto, en el que por mucho que se haga o se deje de hacer, la autocrítica no existe; existe más inculcar en la sociedad frases como “todos son iguales”, “más vale malo conocido” y sutiles artimañas de un partido que explota al máximo la disciplina de sus votantes, pese a que sus métodos deterioren en muchas ocasiones las bases de la democracia.
Hace unos días, decía en contestación a la presidenta de nuevas generaciones de Ibi que me siento orgulloso del trabajo desarrollado por mis compañeros durante estos años. De cómo han trabajado incansablemente para fiscalizar la acción de gobierno, para intentar evitar el caciquismo, el abuso de poder, la manipulación, la mentira,… Y sé que no nos van a callar, que esto es una democracia por mucho que les moleste y que hay que dar explicaciones, que el “porque yo lo digo” no significa que sea verdad, que por mucho que se intente censurar hay otras vías para llegar a la población y seguiremos trabajando para llegar a todos los que quieran oír. Un trabajo que se va a seguir realizando a todos los niveles, con la misma o más intensidad, y mediante el cual garantizaremos a la ciudadanía que todo se hace con orden, demostraremos que no todos los políticos son iguales, que otro camino es posible y, como dice un gran compañero y amigo, que serán los políticos los que gestionen las decisiones del pueblo y no el pueblo quien pague las decisiones de los políticos; en resumen, para que vuelva la verdadera democracia.
Tengo sesenta y un años, y hace cuarenta y dos que trabajo como profesor en un colegio de Alcoy. Desde que comenzó el sistema electoral, he votado siempre a los comunistas, pero, desde hace unos meses, y ahora más que nunca, me he decidido por los socialistas, que es un partido con “raíces profundas” en la historia de nuestro país y, el único capaz, de hacer frente a la derecha con una posible mayoría si se hacen las cosa bien y volvemos a nuestros orígenes de “izquierdas”.
Tú pareces muy joven, pero en los años setenta, hubo un libro que tuvo mucho éxito. Se titulaba “TENER O SER” de Erich Fromm…
¿A qué viene ahora el rollo este del libro…? te preguntarás… Pues viene a que hace cuarenta años, los de la izquierda teníamos clarísimo qué era el SER: solidaridad, hermandad, honradez. juego limpio, fraternidad, trabajo honrado, seriedad en las responsabilidades… y un largo etcétera. También teníamos clara que la derecha, por mucho que fuese a misa los domingos, lo único que le interesaba era el TENER: capital rentable, explotación obrera, engaño fiscal, hipocresía y un talonario bien surtido… ¡lo demás eran bobadas!
A ver si, de una vez por todas, volvemos de nuevo a nuestros orígenes. Un saludo.
Volviendo unas décadas atrás, al hilo de las raices del socialismo PSOE al que alude el comentarista sr. Reig Ferrer, recuerdo que en el 32 -IIRepública- en la convocatoria electoral a Cortes, los Anarquistas al grito de NO VOTES, vino el triunfo de la CEDA – con ello el bienio llamado negro. Los anarquistas tenian prisa en la “revolución” lo que no se había podido hacer en siglos, se queria conseguir en meses. Fieles aliados, seguro sin pretenderlo y como ahora, de la derecha, y por los graves errores de la izquierda en el poder y la pinza como antaño Aznar/Anguita, es lo que hay. Las coaliciones post-electorales son tan democráticas como que gobierne la mayoría: caso contrario, no haría falta, a la constitución del nuevo Ayuntamiento, votar al Presidente-Alcalde del mismo. Se que en Ibi esto es imposible por la actitud de Joan Valls, que a pesar de sus años peca de “pardillo”, pués Nico en su momento no habia aún experimentado como se las gasta PP Maite. Tiempo al tiempo. Tenemos que perseverar y ver las enseñanzas del tiempo, el tiempo nos sobrepasará y vendrá mas gente que no se doblegará y seguirá votando progresista. Lo que verdaderamente vale es alclnzar el poder, no a cualquier precio. Salud y saludos.
Acabo de ver el desalojo por la policía de los “indignados” de Barcelona. Las imágenes son apabullantes, y de nuevo vemos policía atacando a manifestantes pacíficos. Uno creía que nuestra Constitución amparaba el derecho de reunión y manifestación. Está claro que estas personas deben producir alguna molestia a vecinos, y que la posibilidad de celebraciones “culés” hay que prepararlas. Pero si una autoridad se hubiese acercado, negociado con ellos y asegurado que tras las celebraciones se podrían instalar otra vez. quizás se habría evitado tanta violencia. Coincido con Ignacio Reig, debemos reflexionar si los valores democráticos que creíamos tener y las convicciones que eran nuestras señas de identidad, siguen vigentes o han sido solapadas.
La cosa es muy sencilla, si el psoe esta a favor de la ley sinde, dice que obama hizo bien matando a bin laden, protege las deudas de los bancos y no a los hipotecados… pues no les votamos, y si quieren que les votemos que quiten la ley sinde, metan un varapalo a los bancos y cambien la ley electoral, te aseguro que con eso… mayoría absoluta… obviamente no tiene nada que ver Ibi con gobierno central, y no teneis la culpa.
Asi es como se ganan unas elecciones y no haciendo autocrítica cada vez que te dan un varapalo y escribiendo posts en blogs echando la culpa a los demás…
http://josecarloscarmona.blogspot.com/
Un abrazo…
Estoy de acuerdo con Felix, si el gobierno no la hubiera cagado en muchas cosas importantes, otro gallo cantaría. No nos representa ni el PSOE ni el PP (me refiero a los indignaos, entre los que me incluyo). En vista de lo que hacen, no nos representan..o es que hay que estudiar una carrera para darse cuenta de que esa política al final viene a ser lo mismo que teníamos? si……vale, que unos tienen un talante y los otros tienen otro…bueeeeno; que unos nos meten en guerras y los otros no (perdón, en esto me equivoco), vaaaale; que unos están al servicio de la clase alta y los otros no (uy, en esto me equivoco también)…pues dejémoslo en el talante, porque no tengo ganas de seguir equivocándome. Que con talante no se va a ningún sitio si falla la base. Que la gente ya no es analfabeta y se da cuenta de todo. La gente votó el cambio para ver un cambio, y NO LO HEMOS VISTO! que no queremos más PP-PSOE. Aunque vosotros no teneis la culpa, es cosa de los de arriba. El principal problema es la corrupción, en las plazas pedimos que los políticos no tengais privilegios, que se os corten las manos cuando robeis, es decir, que no podais volver a la política. Pero eso es mucho pedir, ¿cómo van a aceptar hacerlo si son los propios ladrones los que hacen las leyes?. Siempre hay buenas personas dentro de la política, pero sois tan pocos….un saludo a todos ellos. Ánimo